Fuente: Barani Design
Cuando el rescate debido a las avalanchas necesita de datos confiables, solo una estación meteorológica puede enviarlos desde debajo de la capa de nieve con un alcance inalámbrico de más de 12 km (7,5 millas)
El clima extremo requiere un hardware resistente
En meteorología, la verdadera diferencia entre el hardware profesional y el comercial no solo está en la precisión de la medición, la estabilidad y la precisión de la medición a largo plazo, sino también en la dureza, robustez y capacidad de supervivencia.
La delgada línea entre el clima extremo y un desastre climático es el daño causado y la pérdida de vidas. Las decisiones oportunas y precisas requieren de datos precisos y confiables en las situaciones climáticas más extremas. Esto es lo que diferencia al equipo meteorológico profesional del resto y permite la prevención de desastres y la pérdida de vidas. Las estaciones meteorológicas MeteoHelix IoT Pro donadas al Servicio Eslovaco de Avalanchas están demostrando su valía frente a todo el hardware existente para estaciones meteorológicas.
Enterrado vivo bajo la nieve
Enterrado bajo una capa de nieve soplada por el viento durante más de dos meses a 1727 metros (5669 pies) sobre el nivel del mar, el MeteoHelix siguió midiendo y enviando datos inalámbricos, cada 10 minutos y sin interrupciones, a las puertas de enlace Sigfox instaladas por SimpleCell y ubicadas a 12.5 km, 16.5 km, 20 km, y a 32,5 km. La capa de nieve de más de 3 metros de altura fue inesperada aquí en el invierno más cálido que se haya registrado.
Durante los dos meses, toneladas de viento soplaron nieve consolidada con una fuerza tan aplastante que devastó otros equipos meteorológicos. Bajo esta fuerza, el soporte de montaje de acero inoxidable que sostenía el MeteoHelix se dobló como una hoja de papel (como se muestra en la foto adjunta). El MeteoHelix, no obstante, sobrevivió sin daños.
Después de ser desenterrado, y durante los siguientes dos días a medida que las temperaturas subían por encima del punto de congelación, la nieve se acumuló alrededor de sus sensores. El MeteoHelix IoT Pro volvió a medir la temperatura atmosférica (en lugar de la temperatura de la capa de nieve) para el que fue diseñado y que, debido a su diseño helicoidal de protección contra la radiación solar, realiza mejor y con mayor precisión que cualquier otra estación meteorológica profesional.