“El almacenamiento inadecuado de alimentos puede ocasionar varios problemas, como el crecimiento de bacterias y moho, el deterioro de los alimentos debido a la descomposición natural e incluso el desperdicio de alimentos, que cuesta miles de millones de dólares anuales en todo el mundo. A continuación se detallan algunas de las áreas que se ven afectadas por el almacenamiento inadecuado de alimentos.
Bacterias y Moho
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos dice que toda la comida debe congelarse o refrigerarse dentro de las dos horas posteriores a su salida. De lo contrario, los alimentos perecederos mantenidos a temperatura ambiente entran en la “zona de peligro” de 40 y 140 grados Fahrenheit, o 4.44 a 60 grados Celsius.
En un congelador, la comida debe mantenerse a una temperatura de congelación inferior a 0 grados Celsius o inferior a 32 grados Fahrenheit. El almacenamiento en frío funciona al desacelerar o detener las moléculas de bacterias. Al congelarse, la bacteria muere, pero la refrigeración simplemente los ralentiza, por lo que los alimentos se pueden echar a perder, incluso si se mantienen en un refrigerador a una temperatura adecuada.
Oxígeno
Según Wonderopolis, un sitio informativo creado por el Centro Nacional para el Aprendizaje de la Famila en los Estados Unidos, el deterioro de los alimentos es causado por el oxígeno (aire), la luz, la humedad y las bacterias. Tan pronto como la comida se cosecha, comienza a descomponerse. La mayoría de las veces, las barreras protectoras de los alimentos (como las cáscaras de las frutas) ayudan a retrasar este proceso, pero solo tenemos días o semanas para que la comida esté fresca y bien para que comamos. Los alimentos deben mantenerse en recipientes adecuados y refrigerados cuando sea necesario para disminuir la tasa de deterioro.
El gusto de los alimentos se ve afectado
A medida que los alimentos comienzan a descomponerse debido a un almacenamiento inadecuado o por un proceso natural, su sabor puede comenzar a cambiar. Esto puede hacer que la comida sea difícil de comer, ya que a algunas personas puede no gustarles el sabor de los alimentos cambiantes. Los plátanos son buenos ejemplos de esto: a algunas personas les desagradan los plátanos “maduros” cuyas cáscaras han empezado a ponerse negras. No importa la comida, la forma en que se almacena afecta su sabor.
Los negocios no están preparados
El desperdicio de alimentos impone una carga a las empresas, ya que pueden carecer de los ingredientes que necesitan para preparar platos para los clientes. Esto puede llevar a clientes infelices, estrés en la cocina y viajes apresurados a la tienda de comestibles para encontrar reemplazos, que no siempre están disponibles. Al monitorear adecuadamente la temperatura de los alimentos, las empresas pueden reducir el crecimiento de bacterias y mohos, el deterioro de los alimentos y la escasez.
De qué manera los sensores ayudan a cumplir con las pautas de seguridad alimentaria
Al monitorear constantemente las temperaturas de los alimentos, las empresas pueden estar mejor preparadas, proporcionando así una experiencia más segura (y más feliz) para sus clientes y empleados. A medida que se controla la temperatura de los alimentos, los propietarios de negocios pueden rastrear sus electrodomésticos de la cadena de frío, garantizando un almacenamiento adecuado de los alimentos.
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Fuente: Sigfox