Compartimos –en su totalidad– la traducción al español este interesantísimo artículo aparecido en el blog FINTECH FINANCE sobre la forma en que el IoT está afectando a todo el sistema financiero. El autor, Sachin Modak, juega con las palabras (finanzas e internet) y lo llama: El FINternet de las cosas:
“El Internet de las cosas (IoT) está en auge. Hay estadísticas asombrosas acerca de una red para incluir 25 millones de dispositivos en 2020 con un beneficio económico global de casi 2 billones de dólares. Mientras que esta “tercera revolución industrial” trae automáticamente a la mente los efectos dramáticos para las industrias de la venta al por menor, de la fabricación, del transporte y de la energía, en los servicios financieros no se piensa de esta forma. Sin embargo, dado que el valor subyacente en el IoT es la transferencia de datos, y el sector financiero depende en gran medida de la recopilación y el análisis de datos, es difícil no imaginar un IoT que no perturbe la industria de servicios financieros. Las instituciones financieras, especialmente los bancos minoristas, han invertido cantidades crecientes de recursos en el desarrollo tanto de su infraestructura interna como de las capacidades tecnológicas orientadas al consumidor. IDC Financial Insights predice que los bancos minoristas gastarán más de 16.000 millones de dólares en iniciativas de tecnología digital de la información, y este gasto seguirá aumentando. De hecho, según la sexta encuesta anual de QI digital de PWC, los servicios financieros son una de las 10 principales industrias que ha estado invirtiendo en sensores para posibles innovaciones del IoT.
El atractivo del IoT es hacer que los objetos físicos y estáticos sean atractivos e inteligentes. Más y más la experiencia del cliente superará el precio y el producto como el diferenciador clave de la marca. Esto significa que los clientes potenciales elegirán la marca con la que es más fácil trabajar, antes de considerar la fidelidad a los precios o a la marca. ¿Cómo se puede transformar la experiencia ATM aumentándola con el smartphone o smartwatch pero omitiendo la experiencia de la tarjeta de débito? Los bancos minoristas también pueden imitar cómo los minoristas están comenzando a colocar sensores en las tiendas para sugerir detalles del producto, descuentos y recomendaciones a través de los teléfonos inteligentes de los consumidores. Investigaciones recientes muestran que los consumidores que reciben mensajes personalizados tienen casi 20 veces más probabilidades de comprar. Al conectar el entorno de banca minorista, los bancos pueden aumentar drásticamente la tasa de adopción de líneas extra de servicios con mensajes contextuales personalizados.
Esta experiencia también se puede tomar fuera del punto de venta de la banca minorista hacia el punto de compra, como cuando se financia un automóvil nuevo. Con los bancos que ofrecen competitivamente las tasas de interés bajas, los consumidores suelen ir con la institución financiera a la que han sido recomendados o expuestos por la mayoría. Con el IoT, cuando un consumidor entre en el concesionario, podrá ser posible para los bancos minoristas alertarlo sobre la cantidad de financiación que han aprobado o entregar propuestas de préstamos personalizados de manera oportuna.
Otra oportunidad está en el sector de los seguros. Con respecto a la gestión de riesgos, algunas aseguradoras de automóviles están comenzando a ofrecer un seguro basado en el uso, de esa forma pueden alinear el comportamiento del manejo con las tasas de primas para el seguro de automóviles. Con el surgimiento de la telemática (los dispositivos de telecomunicación dentro del vehículo), los automóviles ahora pueden transmitir los datos de comportamiento de los conductores a las compañías de seguros para que puedan evaluar los riesgos de los conductores y las primas en consecuencia. Esto no sólo beneficia a los aseguradores, sino también a los conductores de bajo riesgo porque sus primas reducidas son mejores representaciones de su seguridad al manejar.
Ahora, imagine un caso de uso similar pero con seguro de hogar. Con las nuevas plataformas de viviendas inteligentes, los propietarios pueden proporcionar datos voluntarios sobre cómo manejan sus hogares. Las aseguradoras pueden recompensar el comportamiento (como el cierre de sus puertas al salir de sus hogares) con el fin de disminuir el riesgo de robo o apagar sus estufas y hornos cuando no está en uso para minimizar el riesgo de un incendio. Hasta ahora, no había una manera medible o confiable de transmitir esta información con los aseguradores de origen. Pero ahora, con el Internet de Cosas y las Casas Inteligentes, todos estos datos ahora pueden ser recopilados, administrados y compartidos.
El “Fin”-ternet de las cosas se está convirtiendo rápidamente en una realidad para muchas instituciones de servicios financieros. Para que las empresas realmente innoven y proporcionen a sus clientes las experiencias que esperan, los productos y entornos conectados deben formar parte de su hoja de ruta.”